La siguiente historia es basada en la siguiente imagen con un toque Yuri lesbico para ver que piensan.
La noche de Navidad había sido
una noche de fiesta para dos amigos, Ryujin y Kiriu. Habían estado bebiendo
mucho y se habían dejado llevar por la euforia del alcohol. Estaban en una
fiesta de Navidad en una casa grande, llena de música y risas.
Ryujin, un hombre grande y
rubio, se levantó de la silla y se dirigió hacia Kiriu, otro hombre moreno y
alto. Kiriu se encontraba riendo y sonriendo, pero Ryujin se sintió que tenía
que hacer algo divertido.
"¡Es hora de broma!"
gritó Kiriu, con la voz desafinada.
Ryujin se dio la vuelta y
sonrió. "¡Vamos! ¿Qué broma?"
Kiriu se acercó a Ryujin y le toco
en su mejilla con un muérdago. Kiriu reaccionó rápidamente y trató de besar a Ryujin,
pero Ryujin se retiró rápidamente.
"¡No! ¡No te
atreves!" gritó Kiriu, riendo.
Ryujin se quedó confundido y
sonrió. "¿Qué pasa? ¿Es una broma?"
Kiriu se rió aún más. "Sí,
es una broma. Te besare con un muerdago. ¿Te gusta?"
Ryujin se rió también. "No
es momentos para bromas infantiles".
Con eso dicho Ryujin quiso
dejarlo así, pero como ambos estaban borrachos Kiriu no dejaría que escapara de
esta travesura.
Kiriu empujó a Ryujin hacia
atrás y comenzó a perseguirlo, gritando "Beso navideño!" mientras
Ryujin corría en dirección opuesta. Los demás invitados a la fiesta se unieron
al juego, riendo y gritando "Beso navideño!" mientras se precipitaban
hacia Ryujin.
Ryujin, intentando escapar,
corría con todas sus fuerzas, pero Kiriu lo persiguió, siempre a un paso del
siguiente. Los dos amigos se habían convertido en figuras de un juego ridículo,
y todos estaban divertidos.
Ryujin y Kiriu continuaron
corriendo por la casa, sus piernas moviéndose a toda velocidad. Su cabello
comenzó a crecer con una velocidad asombrosa, convirtiéndose en cabellos largos
y lizos que les caían sobre los hombros mientras corren.
Sus ropas también cambiaron,
volviéndose más como las de niños andróginos. Sus pantalones y camisetas se
convirtieron en Shorts y tops cortos, y sus zapatos se convirtieron en
zapatillas de deporte.
A medida que corrían, su cuerpo
continuaba cambiando, pero no se detuvieron a preguntarse qué estaba sucediendo
con ellos. Simplemente seguirían corriendo, evitando ser atrapados por sus
amigos y familiares.
La casa se convirtió en un
laberinto de cuartos y pasillos, y Ryujin y Kiriu se perdieron en él. Pero no
parecían importarles, ya que estaban demasiado ocupados corriendo y riendo.
Sus voces se convirtieron en
gritos de alegría y risa, mientras corrían por la casa. Sus risas se
convirtieron en una especie de canto, un canto que resonaba a través de la
casa.
"¡Beso navideño! ¡Beso
navideño!" gritaban, mientras corrían y saltaban por la casa.
Su cabello largo y lioso les
caía alrededor del rostro mientras corrían, y sus ojos brillaban con alegría y
diversión.
No paraban nunca, y no se
detenían. Simplemente seguían corriendo, evitando ser atrapados y disfrutando
de la emoción del juego.
La casa se convirtió en un
espejo para su imaginación, y Ryujin y Kiriu se convirtieron en dos figuras de
un sueño infantil. Corrían por la casa, riendo y gritando, sin cesar.
Ryujin y Kiriu continuaron
corriendo por la casa, sus piernas moviéndose a toda velocidad. Su cabello
comenzó a crecer con una velocidad asombrosa, convirtiéndose en cabellos largos
y lizos que les caían sobre los hombros mientras corren.
Su ropa también cambió,
volviéndose más como las de niños andróginos. Sus pantalones y camisetas se
convirtieron en shorts rosados y tops blancos, con un diseño de estrellas y
corazones en todo lugar. Los shorts rosados de Ryujin estaban un poco más grandes
que los de Kiriu, que parecían haberse ajustado perfectamente a su cuerpo.
Sus zapatos se convirtieron en
zapatillas de deporte rosadas, que se ajustaban perfectamente a sus pies
pequeños. Los zapatillas de deporte rosadas de Ryujin tenían un diseño de
estrellas y corazones en todo lugar, mientras que los de Kiriu tenían un diseño
de flores y hojas.
A medida que corrían, su cuerpo
continuaba cambiando, pero no se detuvieron a preguntarse qué estaba sucediendo
con ellos. Simplemente seguirían corriendo, evitando ser atrapados por sus
amigos y familiares.
La casa se convirtió en un
laberinto de cuartos y pasillos, y Ryujin y Kiriu se perdieron en él. Pero no
parecieron importarles, ya que estaban demasiado ocupados corriendo y riendo.
Sus voces se convirtieron en
gritos de alegría y risa, mientras corrían por la casa. Sus risas se
convirtieron en una especie de canto, un canto que resonaba a través de la
casa.
"¡Beso navideño! ¡Beso
navideño!" gritaban, mientras corrían y saltaban por la casa.
Su cabello largo y lioso les
caía alrededor del rostro mientras corrían, y sus ojos brillaban con alegría y
diversión.
No paraban nunca, y no se
detenían. Simplemente seguían corriendo, evitando ser atrapados y disfrutando
de la emoción del juego.
La casa se convirtió en un
espejo para su imaginación, y Ryujin y Kiriu se convirtieron en dos figuras de
un sueño infantil. Corrían por la casa, riendo y gritando, sin cesar.
Mientras continuaban corriendo
por la casa, Ryujin y Kiriu comenzaron a sentir un cambio en su cuerpo. Su
forma andrógina comenzó a cambiar, y se convirtieron en dos niñas hermosas.
Kiriu, que ahora tenía un
cabello rosado y ojos de color rosa con toques ambar, sonrió con una serenidad
que Ryujin no había visto antes. Su personalidad también había cambiado,
pasando de ser astuta y manipuladora a ser tranquila y despreocupada.
Ryujin, por otro lado, tenía un
cabello rubio y ojos rojos. Su personalidad también había cambiado, pasando de
ser tímida y nerviosa a ser más inocente y vulnerable. Se ponió nerviosa y
asustada al ver el cambio que se estaba produciendo en su cuerpo y en su
relación con Kiriu.
Kiriu, que ahora parecía tener
una comprensión más profunda de las emociones de Ryujin, se acercó a ella con
una sonrisa tierna. "No te preocupes, Ryujin", dijo. "Todo está
bien. Estamos juntas, y eso es lo que importa".
Ryujin, que se sentía
confundida y asustada, no pudo responder. Kiriu la abrazó suavemente y la llevó
a un rincón de la casa, donde se sentaron juntas en silencio.
Mientras tanto, Kiriu comenzó a
sonreír con una astucia que Ryujin no había visto antes. Su ojos rojos
brillaban con una inteligencia y una astucia que hacían que Ryujin se sintiera
más vulnerables que nunca.
Ryujin, que se sentía atrapada
y manipulada por Kiriu, no podía ayudar sino sentirse más y más asustada y
confundida. Kiriu, por otro lado, parecía disfrutar de su situación, sabiendo
que tenía el control sobre Ryujin y podía hacer con ella lo que quisiera.
La situación se volvió cada vez
más tensa, con Ryujin sintiendo que estaba siendo atrapada y manipulada por
Kiriu. Pero Kiriu simplemente sonrió y se sentó más cerca de Ryujin, sin dejar
de mirarla con Those ojos rojos brillantes.
Ryujin y Kiriu se dieron cuenta
de que estaban muy cerca uno de otro. No se detuvieron, sino que seguiron
corriendo, sus pies pareciendo moverse de solita. De repente, sin previo aviso,
Kiriu se detuvo y se dio la vuelta para enfrentar a Ryujin.
Ryujin, sorprendida, se detuvo
también y se preparó para lo que fuera posible suceder. Pero en lugar de una
acción agresiva, Kiriu se acercó a ella con una sonrisa lascivo en su rostro.
Se besaron, un beso apasionado que
se convirtió en un momento mágico y transformador para ambas. Ambas empezaron a
sentir una sensación muy extraña en la región púbica, mientras se besaban y
empezaban invirtiera, mientras los órganos reproductivos femeninos se formaban
dentro de sus pequeños cuerpos buscando nuevos hogares como un par de ovarios a
los lados de un útero en crecimiento dentro de ellas; una sensación de torsión
los seguía a medida que se formaban los tubos y se fusionaban con ellos. El
estrógeno comenzó a bombear, estimulando aún más su evolución hacia la
feminidad, diluyendo el semen blanco que brotaba de sus pollas, sus cuerpos no
estaban acostumbrado a las sensaciones extrañas y no sabían cómo adaptarse a
ellas. Eso solo sirvió para hacer que el confuso placer fuera más enloquecedor
para ambas. Pero en todo este caos, ambas siguieron gimiendo de placer mientras
se seguían besando como una pareja.
Mientras besaban, sus recuerdos
y personalidades terminaba de cambiar. Kiriu, que antes era un personaje
andrógino, se convirtió en una niña con cabello rosado y ojos de color rosa con
toques ambar. Su personalidad se transformó también, pasando a ser más astuta y
manipuladora que Ryujin. Era capaz de captar las sutilezas de las personas y
utilizarse a su favor, y podía ser muy descarada y desenfrenada en sus
acciones.
Ryujin, por su parte, se
convirtió en una niña con color rubio y ojos rojos. Era más tranquila y
despreocupada que Kiriu, pero su timidez y nerviosismo la hacían vulnerable a
las bromas y juegos de su hermKuro. Sabía que Kiriu siempre estaba dispuesta a
hacer algo para entratarla, y se ponía nerviosa al pensar en las posibles
situaciones que su hermKuro podría crear para ella.
La transformación fue mágica, y
Ryujin y Kiriu se miraron entre sí, sorprendidas por sus nuevas personalidades
y apariencias.
Kiriu, ahora con su nuevo
nombre de Kuro von Einzbern, se rió bromeando con Ryujin, ahora Illyasviel von
Einzbern, alias Illya, que se puso nerviosa y tímida ante su nueva situación. Olvidando
lo anterior, reanuraron lo que estaban haciendo.
Sus labios se movían en
sincronía, mientras sus lenguas se entrelazaban en un baile apasionado. Kuro
pasó su mano por el pecho de Illya, rozando suavemente su seno pequeño y firme.
Illya gimió suavemente, y Kuro sonrió, sabiendo que la estaba excitando.
Illya, a su vez, pasó su mano
por el pecho de Kuro, tocando su seno pequeño y delicado. Kuro se estremeció, y
sus labios se separaron por un momento, antes de volver a unirse en un beso
apasionado. Ambas pasaron de estar pegadas a la pared besándose es que ahora están
acercándose para acostarse en su cama,
Mientras se besaban, sus
piernas se entrelazaron, y sus cuerpos se acercaron aún más. Sus manos se
deslizaron por sus muslos, rozando suavemente la piel suave y delicada. La
tensión entre ellas era palpable, y el aire estaba cargado de deseo y pasión.
Sus cuerpos entrelazados en una
movida con mucha fluides, mientras exploraban sus nuevos cuerpos. En un gesto
ligero, Kuro inclinó su cabeza hacia adelante, y Illya se correspondió, sus
labios se tocaron suavemente en un beso en el que entrelazaban sus lenguas con pasión.
Un toque apasionado que desencadenó un arrebato de pasión en ambas. La música
se detuvo temporalmente, y solo se escuchaba el susurro de sus respiraciones, los
golpes de sus corazones y el susurro de su alegría.
La escena se desdibujó en una
mar de pasión, sus cuerpos se fundieron en una sola masa de amor y deseño, sus
labios se encontraron de nuevo, esta vez con una intensidad que no había habido
antes. La música regresó, pero ahora era un acompañamiento para su ritmo, un
ritmo que no tenía límites ni fronteras. Solo había el beso, el calor, la
pasión y el amor que los unía. Kuro y Illya se miraron a los ojos y, con una
voz unida, murmuraron en unison: "Feliz Navidad". La música regresó,
esta vez con una versión instrumental de "Feliz Navidad", y el ritmo
de sus corazones se convirtió en un símbolo de amor y aceptación.